8. Crimen perfecto
A pesar de que la primera vez que la vi no me gustó mucho, es una película muy interesante y entretenida. Es como si fuera uno de los mejores episodios de Colombo: la trama de la resolución del misterio se basa en pequeños detalles, se sabe quién es el asesino desde el principio, el personaje del policía siempre aparenta ser alguien que no se da cuenta de nada, y pillan al asesino con algún truco que les hace encontrarle con las manos en la masa.
7. Los pájaros
Esta película movió masas de maneras alucinantes: un día todos le echaban con alegría pan a las palomas en el parque, y al día siguiente nadie podía siquiera acercarse a los gorriones. La falta de banda sonora y la gran cantidad de los momentos de silencio convierten el suspenso de esta película en uno de los mejores.
6. Rebecca
La trama de esta película es una de las mejores sobre obsesión y fantasmas que existen en la historia del cine. Cuenta con giros atrapantes que invitan a seguir pegado a la silla hasta que se termina. No podemos pasar por alto el personaje del ama de llaves de Rebeca; es un villano escalofriante que sigue resonando hasta hoy en día en la cultura popular.
5. Psicosis
La clásica de clásicas de esta lista. Hitchcock revolucionó el cine con la famosa escena de la ducha, por la la forma de ser rodada y la originalidad del montaje. Además, el personaje de Norman Bates se ha vuelto en uno de los más queridos del cine de este director. Si no hubiera sido por él, es posible que la fama de la cinta no se hubiera disparado tanto y no hubiera una serie de cinco temporadas que hablasen más en profundidad sobre este personaje.
4. Extraños en un tren
A pesar de que no la considero tan infravalorada como la película del primer puesto, lo cierto es que de esta película se habla poco. Y no entiendo porqué. Tiene uno de los mejores asesinos de todos los de esta lista, y es un personaje tan analizable psicológicamente como lo es Norman Bates. El acto final es muy intrigante y la pelea final hace que quieras arrancarte los pelos de tanta tensión (sobre todo por el viejo que intenta parar el tiovivo, quien hayan visto la película lo entenderán). Cuenta con unos planos estupendos: el primero de los zapatos, el del tenis, el del fuego reflejado en las gafas, el del asesino de pie observando en la lejanía, y un largo etcétera. Es una película indispensable.
3. La ventana indiscreta
Esta película es un clásico absoluto del cine, y una de las mayores joyas cinematográficas que se han creado. ¿Quién diría que un pequeño relato que transcurre desde una ventana podría funcionar como una película de casi dos horas? Esta es la magia de Hitchcock y de sus grandiosas habilidades de dirección. Es un milagro cinematográfico como lo es 12 hombres sin piedad. Podrá transcurrir entera en una sola habitación, pero el suspense está presente en todo momento, sin dejar aburrirte en un solo instante.
2. El hombre que sabía demasiado
Esta era mi favorita cuando era pequeña, y no es para menos. La intriga de la película está muy bien tejida, presentada y narrada, además de contar con la estupenda actuación de James Stewart y de Doris Day. Tiene una de las historias más interesantes y escalofriantes de entre las obras de Hitchcock, y te deja pegado en el asiento hasta el final. También cuenta con una fotografía y una edición que sobrepasa al resto.
1. Frenesí
A veces me pregunto cómo es que esta película no es tan conocida. Es extraño cómo en algunas listas está situada como una de las mejores de Hitchcock, y en otra se considera de las peores. Lo cierto es que es una de las más infravaloradas de este famoso director. Pregúntale a alguien por películas de Hitchcock, y muy pocos o ninguno te nombrarán este título. A pesar de ser mi favorita, no la considero la mejor. Pero sí creo que es una de las mejores, y una joya que todos podrían disfrutar, siendo fans del cine clásico o no. El suspense y el misterio te envuelven literalmente hasta el último segundo, tiene el mejor asesino de Hitchcock, alguno de los planos más increíbles, y es la película de esta lista que mejor sabe coordinar la tensión con elementos cómicos.
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